LA TRANSMIGRACIÓN DE LAS ALMAS SEGÚN PLATÓN.

La transmigración de las almas, a veces llamada metempsícosis, se basa en la idea de que una alma puede salir de un cuerpo y residir en otro, ya sea humano o animal, o en un objeto inanimado. La idea aparece en varias formas en culturas tribales de muchas partes del mundo. La noción era conocida en la Grecia antigua, especialmente en el orfismo, y fue adoptada en forma filosófica por Platón y los pitagóricos.

Según Platón creía firmemente en la transmigración de las almas. Platón decía que todos los seres humanos tenemos reminisencias que nuestra alma poseía antes de volver a encarnarse en un cuerpo humano.

Platón estimaba que la mayeútica, era un claro ejemplo de ello. Con las preguntas correctas, cualquier interlocutor podía sacar la verdad que existe dentro de una persona. Se debe precisamente a los recuerdos que reverberan en nuestra alma debido a su anterior paso por el Mundo de las Ideas. Así pues, incluso un esclavo podía demostrar gran conocimiento si el interrogatorio era correcto.

Si los seres humanos somos perceptivos, se debe a que nuestra alma no es transitoria. Todavía existe la comprensión de la esencia, que nos demuestra la inmortalidad de la misma.

Por eso, y siempre hablando según Platón, la vida no es mas que una preparación para la muerte. Por ello para él, fallecer no es en realidad un final, sino un fin ya que libera al alma del cuerpo físico, y esta vuelve a separarse y reencontrarse con su esencia.